REFLEXIONES ¿Calientas antes de entrenar? ¿”Estiras” después de entrenar?

Hacer un buen calentamiento y una vuelta a la calma es tan importante como la parte principal de nuestro entrenamiento, independientemente de la actividad que estemos realizando (correr, HIIT, Fuerza, Pilates, Yoga).
1 de julio de 2024

Cuando hacemos deporte de manera dirigida, en una clase grupal o con un entrenador, siempre oímos eso de “calentar” y “estirar” (o vuelta a la calma)

Solemos darles al calentamiento y a la vuelta a la calma menos importancia de la que se merece, los ninguneamos y olvidamos en muchas ocasiones.

Estamos en una clase dirigida y el entrenador dice “pues ya hemos calentado, ahora empieza la parte principal” y pensamos “¿Eso ha sido solamente el calentamiento? ¡Si ya no puedo más!

Acabamos la clase y el entrenador dice “ahora estiramos” y pensamos “me tengo ir, tengo cosas que hacer…”

En esta vida moderna siempre estamos con prisas, tenemos poco tiempo para entrenar y nuestra primera decisión siempre es no hacer el calentamiento y/o no hacer una vuelta a la calma (o estirar como solemos llamarlo). Hacer un buen calentamiento y una vuelta a la calma es tan importante como la parte principal de nuestro entrenamiento, independientemente de la actividad que estemos realizando (correr, HIIT, Fuerza, Pilates, Yoga).

Podría explicarlo con muchas palabras técnicas, pero, en resumen, nuestro cuerpo se merece que le avisemos de lo que va a hacer, y se merece un tiempo de calma para detectar que ya no tiene que estar a tope y puede empezar a recuperarse.

Hablemos del Calentamiento:

- Su misión es preparar de manera integral al cuerpo y a la mente para afrontar la parte principal del entrenamiento, mejorando el rendimiento y disminuyendo el riesgo de lesiones.

- La duración debe ser proporcional a la intensidad de la actividad, pudiendo ser incluso más largo que la parte principal del entrenamiento.

- Es recomendable que tenga un contenido específico al objetivo de la sesión de entrenamiento.

No nos olvidemos de la Vuelta a la Calma:

- Su misión es ayudar a nuestro cuerpo a volver gradualmente a su estado de reposo, ayudando a la recuperación tras el ejercicio y disminuyendo el riesgo de lesiones post ejercicio.

- La duración debe ser proporcional a la intensidad de la actividad y siempre progresivo de más a menos.

- Debe incluir ejercicios de baja intensidad y ejercicios de movilidad con la finalidad de recobrar nuestro rango de movimiento articular.

- Sería muy interesante incluir ejercicios de respiración profunda y relajación con el fin de disminuir la tensión muscular y mental.

Y el último punto, común a ambas actividades, y el más importante…

- Nunca debes eliminar el calentamiento y la vuelta a la calma de tus entrenamientos, aunque tengas poco tiempo.


Seguro que aún te quedan un millón de dudas, pero ya sabes, acude a un profesional del deporte, que estará encantado de ayudarte. ¡Feliz entrenamiento!