Pilates. Quiero resultados ¡ya!

Vivimos en la sociedad de lo quiero, lo tengo. Pretendemos obtener todo lo que deseamos con la mayor rapidez posible, para, de inmediato, pasar al siguiente proyecto, sin disfrutar del proceso.
16 de mayo de 2024

En demasiadas ocasiones, cuando uno de mis alumnos comienza a practicar la disciplina del Pilates su principal duda es, ¿cuánto voy a tardar en notar los beneficios?

Con los años, he preparado una respuesta tipo para solventar la situación: Depende de los días que vengas a entrenar, depende de tu condición física inicial, depende de tu esfuerzo en cada sesión de entrenamiento. Depende es la palabra que más utilizo, aunque en realidad lo que me gustaría plantearle es el motivo de su prisa.

Pilates no es una disciplina pensada y planificada para obtener unos resultados a nivel local: aumentar la masa muscular, ganar resistencia, lograr una mayor elasticidad. Pilates es mucho más, es un entrenamiento que trata de hacernos tomar conciencia de nuestro cuerpo, de sus debilidades, para fortalecerlas, y de su potencial, para desarrollarlo por completo. Lograr todo ello necesita tiempo y esfuerzo.

En tres meses de sesiones regulares comprenderemos la dimensión del trabajo a desarrollar. En un año, dominaremos la técnica y en dos años, realizaremos un cambio en nuestro cuerpo, en nuestra mente, incluso en la forma en la respiramos y caminamos.

No bases tus entrenamientos sólo en el objetivo que quieres alcanzar, siente orgullo por cada pequeño avance, por cada sesión finalizada en la que sientas que has dado toda la energía que tenías dentro, por cada paso del camino. Disfruta del proceso, construye bases sólidas, crea una rutina que te ayude a mejorar tu yo del día anterior. Y entonces, aparecerán los cambios que necesitas y los resultados que buscas.

Mi abuela decía un refrán que muchas veces me viene a la memoria: El tiempo le dijo al tiempo que le diera el desengaño, y el tiempo le contestó que con el tiempo sería dado. La sabiduría popular basa sus reflexiones en la experiencia. No olvidemos nunca sus consejos, porque encierran el conocimiento transmitido durante generaciones.

En el deporte, y en la vida en general, no tengas prisa, cada proceso de aprendizaje necesita un periodo de tiempo, que no podrás acortar.

Avanzamos

Iván Coujil